Young man stretching beside his office desk to boost blood flow and prevent erectile dysfunction caused by prolonged sitting.

El sedentarismo en el trabajo y su relación con la Disfunción Eréctil

Escrito por: Andrés Suro

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Tiempo de lectura 4 min

Como expertos en la sexualidad masculina, hemos atendido a muchos hombres que se sorprenden al descubrir la relación tan estrecha que existe entre tener un estilo de vida sedentario y padecer problemas relacionados con la disfunción eréctil. Y es que pasar demasiadas horas sentado, especialmente en contextos laborales, puede ser uno de los principales enemigos de tu rendimiento sexual. Y no, no hablamos solo de falta de deseo, sino de cómo nuestro físico y nuestra mente se ven alterados por pasar tanto tiempo en la misma posición.


Es cierto que la disfunción eréctil no siempre es consecuencia de una causa única, pero el sedentarismo es uno de los factores más ignorados y, sin embargo, uno de los que afecta directamente a la circulación sanguínea. Ya sabes que nuestro sistema cardiovascular es el responsable de que llegue la sangre a todas las partes del cuerpo, y una mala irrigación en la zona pélvica dificulta la capacidad del cuerpo para mantener una erección firme y duradera. Por lo tanto, mantener una postura fija durante muchas horas puede interferir en el flujo sanguíneo adecuado, lo que seguramente acabe provocando a medio y largo plazo efectos negativos en la función eréctil.


Estar muchas horas sentado reduce la circulación sanguínea


Puede que te preguntes “si soy joven y nunca he tenido problemas físicos, ¿de qué forma me afecta a mí estar sentado tantas horas?”. Pues resulta que el cuerpo humano está diseñado para moverse. Cuando nos pasamos todo el día sentados frente a un ordenador o en reuniones interminables, la circulación sanguínea se vuelve más lenta, especialmente en las extremidades inferiores y en la zona pélvica (la responsable de las erecciones). Esta reducción del flujo deriva en algunos casos en una menor oxigenación de los tejidos y, en consecuencia, en una disminución de la respuesta sexual.


De hecho, diversos estudios han demostrado que el flujo sanguíneo restringido en la zona perineal puede dañar los nervios y vasos sanguíneos responsables de la erección (Maiorino et al., 2015). Pero la cosa no queda ahí, ya que esto se agrava si además existen otros factores de riesgo como el estrés, tener una dieta poco saludable o la falta de ejercicio físico en tu rutina. Como te decíamos anteriormente, la disfunción eréctil no es solo un síntoma aislado, sino el reflejo de un estilo de vida poco activo.

El impacto psicológico del sedentarismo en la sexualidad masculina


Más allá de lo físico, el sedentarismo también influye en tu mente y tus emociones. Y es que un cuerpo poco activo suele ser sinónimo de menor autoestima, menos energía y motivación y, en muchos casos, cuadros depresivos. Si juntamos todos estos ingredientes tenemos el caldo de cultivo perfecto para padecer algunos problemas y trastornos sexuales, como es el caso de la disfunción eréctil.


Los expertos en Sexología estudian y abordan precisamente la conexión mente-cuerpo ya que es esencial en el funcionamiento sexual. Así, si una persona se siente menos atractiva, más cansada y con menos motivación, es probable que su deseo y capacidad para tener relaciones sexuales se vea afectado negativamente. Esto en algunos casos genera un círculo vicioso donde el miedo al "fracaso" sexual lleva a evitar la intimidad, lo que alimenta aún más el problema. Pero basta de malas noticias, porque tenemos la solución.


4 Ejercicios sencillos para mejorar la circulación y prevenir problemas en la cama


La buena noticia es que el cuerpo responde con rapidez a pequeños cambios. Te aseguramos que no es necesario que te conviertas en un atleta de alto rendimiento para que notes mejoras en la circulación y el rendimiento sexual. Con que incorpores algunos ejercicios muy sencillos a tu rutina diaria, ya consigues estimular la zona pélvica, mejorar la irrigación y prevenir la disfunción eréctil. Te damos 4 alternativas:


  1. Ejercicios Kegel: una forma muy buena de fortalecer el suelo pélvico es contraer y relajar el músculo pubocoxígeo (PC). Solo tienes que contraer el músculo que usarías para detener el pipí, mantenerlo apretado 5 segundos y soltar. Hazlo 10 veces seguidas, 3 veces al día.

  2. ‘Minipaseos’: si trabajas sentado, levántate cada 30-45 minutos y camina durante 3 minutos o haz algún movimiento para activar tu cuerpo, como sentadillas o zancadas. Esto estimula la circulación general y reduce la tensión.

  3. Estiramientos de cadera y pelvis: puedes realizar movimientos como el puente, estiramientos de glúteos o abrir las piernas en mariposa. Esto ayuda a liberar la tensión acumulada por estar sentado mucho tiempo.

  4. Respiración diafragmática: mejora la oxigenación y reduce el estrés, ambos fundamentales para una buena función eréctil. Para realizarla, respira de forma profunda y nota cómo se llena tu diafragma y tu abdomen.

Hábitos saludables para prevenir la disfunción eréctil relacionada con el trabajo


El movimiento es muy importante, pero existen otros hábitos que también te ayudan a tener la mejor forma para prevenir la disfunción eréctil. Uno de los mejores consejos que podemos darte es mantener una alimentación equilibrada, rica en frutas, verduras, grasas saludables y con bajo contenido en azúcares y procesados, ya que favorece la salud vascular. Igualmente, es importante que evites o reduzcas al máximo el consumo excesivo de alcohol y el tabaquismo para proteger los vasos sanguíneos.


Otro punto importante es cómo gestionas el estrés. Somos conscientes de que muchos de los trabajos sedentarios van acompañados de una alta carga emocional (peticiones de última hora, proyectos que van fuera de plazo, tareas que se quedan atascadas…). Por lo tanto, otra forma de reducir la ansiedad es integrar en tu día a día algunas técnicas de relajación como el mindfulness, la meditación guiada o simplemente aprender a desconectar del entorno laboral después de la jornada, que también influye negativamente en tu respuesta sexual.


Conclusión: cuidar tu cuerpo es cuidar tu vida sexual


El vínculo entre sedentarismo y disfunción eréctil es cada vez más evidente e innegable. Si pasas muchas horas sentado debido a tu trabajo, es momento de que te replantees ciertos hábitos para que tu salud en general no se convierta en tu punto débil, especialmente tu bienestar sexual. Puedes incluir rutinas de movimiento, cuidar tu alimentación y gestionar el estrés. Te aseguramos que todos ellos son pilares fundamentales para prevenir la disfunción eréctil.


Como expertos en Sexología masculina, nos gusta recordarte que la sexualidad es un reflejo del estilo de vida: cuanto mejor te sientes contigo mismo y más cuidas tu cuerpo, más satisfactoria será tu vida íntima. Porque sí, moverse también es una forma de quererse.


Referencia


  • Maiorino, M. I., Bellastella, G., & Esposito, K. (2015). Lifestyle modifications and erectile dysfunction: what can be expected?. Asian journal of andrology17(1), 5–10.  https://doi.org/10.4103/1008-682X.137687  

Andrés Suro

Autor: Andrés Suro  (Sexual Coach en MYHIXEL)


Psicólogo especializado en el ámbito social y experto en sexología aplicada a la educación.

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